Se viene las últimas fechas del oficial, pero las miradas se van el tema dirigencial donde se definirá quien será el nuevo presidente del fútbol neuquino.
Se vienen tiempos de definiciones dentro de la Liga de Fútbol de Neuquén. En lo deportivo se juegan en esto días los partidos con asterisco para ponerse al día y encarar las cuatro fechas (Más la del paro) buscando los campeones, ascenso y descensos del interminable oficial 2021-22.
Las cuentas claras, si Rincón sale airoso de los cruces pendientes con Alianza y Maronese, ya tendrá una mano encima de su décimo título, caso contrario se vendrá una definición ajustad al fiel estilo Oficial B, donde son cuatro los que aspiran al campeonato. Los Ascenso de independiente y Unión de Zapala ya están casi cocinados, como así el descenso de Sapere, que termina pagando caro su desorden dirigencial del último año.
Pero además de lo deportivo, lo político será el centro de atención en las próximas semanas. No son los 22 en el rectángulo los principales protagonistas, sino los 24 que se sentarán en la asamblea ya confirmada por parte de Personaría Jurídica el 4 de mayo. Dos bandos bien marcados, con aciertos, desaciertos, y al borde de comenzar los carpetazos para ver quien llega a utilizar el sillón de calle Alderete.
Por un lado el oficialismo, encabeza por Luis Sánchez, quien había anunciado por todos lados su renuncia al cargo de presidente de LIFUNE el 24 de marzo del 2021, pero que al parecer se olvidó de ir al correo a mandar el telegrama. Si bien, están con mandato (re contra) vencido, serán la lista oficial que intentará seguir dirigiendo el barco, que hace varios años está anclado en el mismo lugar.
Por otro lado la oposición, que en las próximas horas definirán quien será la cabeza visible y que buscará ser el nuevo capitán. Son varios los postulantes, algunos con intensiones extra presidenciable, que no dejan de ser valederas y legales. Con la banca y costumbres de un sindicato, más la nueva directiva del deporte provincial. Néstor Mingot, presidente de Centenario, Ariel Koon, acaso la cara más visible de este reclamo recontra válido, por el otro, son los que pican en punta.
Nadie va a negar, como punto alto, el crecimiento en infraestructura, las mejoras profesionales en los formadoras, el gran avance en lo fútbolistico, sumando que se estableció un formato de competencia afianzado y que le dio competencia más fuerte a todas las categorías.
Pero, los procesos evolucionan y ahí es donde se durmió la tortuga. Balances sin presentar, departamento médico acéfalo hace años, falta de capacitación para formadores, poco dialogo en el concejo Federal, y la Patagonia, más la falta de creaciones de nuevas área, que le permitirían el crecimiento a la liga (Entre ellos el departamento de fútbol Femenino) hizo que el descontento llegará en diferentes sectores.
Promesas incumplidas, un torneo en disputa sin las garantías básicas (como un tribunal de penas) dadas, y un juego político que trasciende más allá de los clubes, y que algún interés tendrán dentro de una de las federaciones más importantes de Neuquén.
Dos cosas quedan claras, por un lado, mientras el ahora ex ministro de deportes estaba al frente, todos los clubes estaban cómodos por el manejo y hasta veían los beneficios, por el otro, suena hasta raro, gente que viene dirigiendo hace años la liga sean los propulsores del cambio.
En principio serán 24 los clubes, algunos ni se tomaron el trabajo de mejorar su estado dentro de Personaría Jurídica para tener sus papeles en regla, otros están hace tiempo compitiendo, pero no estarían aún aprobados por asamblea para estar afiliados, por lo que no podrían volar, al igual que otras instituciones donde no se llega a la renovación de autoridades.
Comienza ahora la disputa de sumar votos, algunos apelan a la memoria, a los favores, otros a las quejas y modalidades poco ligadas a una entidad de este tipo, lo cierto es que se escuchan pocas propuestas, y se siente el aroma a llevar agua para su propio molino.
Solo esperamos todos los amantes de la redonda, y parafraseando al más grande de todo el tiempo que la pelota no se manche.
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