Se cumplen dos años del partido de los 32 avos de Copa Argentina entre el Deportivo Rincón vs Newells old boys de Rosario, en cancha de Unión.
Viaje largo a Santa Fe, los juegos EPADe estaban en desarrollo en sus últimos días dentro de Neuquén, pero los amantes de la redonda teníamos ese viernes 18-05 dos eventos importantes dentro y fuera. Por la tarde en cancha de Pacífico el Seleccionado Neuquino definía el título ante Chubut, con resultado esquivo, y por la noche a partir de las 21.30, en cancha de Unión de Santa Fe, El león del Norte tenía otro capítulo en su corta y dorada historia.
Quizás la Copa Argentina se convirtió en el camino más corto para los equipos del interior a la hora de medirse con los grandes de primera, años atrás fue el turno de Independiente que en Lanús tuvo en frente al Racing Campeón del fútbol Argentino de Cocca. Aquella noche del 18 de mayo, el Deportivo Rincón tenía cara a cara al Newells de Rosario.
Estaban en cancha todos aquellos que cada fin de semana veías en las canchas Neuquinas, encabezado por el Capitán Héctor Rueda quien terminaría como el goleador de la Copa Argentina con 4 tantos, tras desquitarse con Sol de Mayo de las Semifinales del Federal B y no pasar sobresaltos ante Ferrocarril Sur de Olavarría.
El pelado ibaseta dispuso de Gustavo Fievet, Nicolás Di Bello, Víctor Benítez, Ricardo López Carrillo y Cristian Correa, Iván Choque Gómez, Rodrigo Canales, Maximiliano Gay, Héctor rueda, Julio Ibáñez y Oscar Muñoz. Mientras que la lepra formó Pocernijc, Facundo Nadavin, Juan Sils, Fabricio Fontanini, Fernando Evangelista. Joaquín Torres, Braian Rivero, Hernán Bernardello, Héctor Fertoli, Luis Leal y Alexis Rodríguez.
En el complemento vieron acción “el Rey” Fernando, quien volvió para un capítulo más, Edgardo Cano y Alan Sack, quien tiene en su palmarés el haber estado en las dos presentaciones neuquinas de la competencia. En el banco quedó Ariel Moyano, otro que faltaba en cancha para cerrar el círculo de los fundadores dentro de la cancha.
Tras una gran noche de Fievet en el arco, el neuquino Joaquín Torres abrió la fortaleza del león y un zapatazo al ángulo, y sobre el final de la primera etapa Alexis Rodríguez encontró un rebote para estampar el 2-0. El león intentó y tuvo algunas chances para poder llegar al grito sagrado por intermedio de Canales y Rueda, lo cierto fue que el resultado no se movió.
Aquella noche Rincón se fue aplaudido por la gente de Newells, y principalmente por los más de 300 hinchas neuquinos que fueron a la cita. Días posteriores esos mismo 11 estaban jugando contra Confluencia en cancha auxiliar de la Chacra. El resultado fue esquivo, pero quien le puede quitar aquel rugir al león.
